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Preocupación en el cerro Catedral por el uso indebido de culipatines: está prohibido y puede ser peligroso

Mientras el invierno patagónico todavía se hace desear, en el Cerro Catedral crece una práctica que preocupa a las autoridades y al concesionario del centro de esquí: el uso indebido de culipatines.

Preocupación en el cerro Catedral por el uso indebido de culipatines: está prohibido y puede ser peligroso

Mientras el invierno patagónico todavía se hace desear, en el Cerro Catedral crece una práctica que preocupa a las autoridades y al concesionario del centro de esquí: el uso indebido de culipatines.

Desde Catedral Alta Patagonia recordaron que está terminantemente prohibido utilizar culipatines dentro del dominio esquiable. El área no solo está habilitada exclusivamente para quienes tengan pase y equipo adecuado, sino que además cuenta con normas de uso específicas. Deslizarse sin las condiciones técnicas mínimas —como casco, botas o fijaciones— implica un riesgo serio tanto para quienes practican esta actividad improvisada como para el resto de los visitantes.

“No hay nieve suficiente y lo que hay está en estado irregular, con piedras o zonas sin cobertura”, explicaron desde la empresa. Esa combinación, junto con la imprudencia de quienes usan culipatines en sectores no permitidos, podría derivar en lesiones. Por eso, los patrulleros ya están notificando a las personas que infringen esta norma, e incluso se evalúan sanciones más estrictas si la situación persiste.

El fenómeno se da, en parte, por la ansiedad que genera el inicio de la temporada y la expectativa por disfrutar de la nieve, especialmente entre quienes llegan desde otras ciudades. Pero los responsables del cerro insisten en que el cuidado del espacio común —y de uno mismo— también forma parte de la experiencia. “Hay muchas formas de disfrutar la montaña, pero todas tienen que respetar las condiciones del entorno y las reglas que la protegen”, remarcaron.

El llamado es claro: ante la falta de nieve suficiente y el riesgo de accidentes, usar culipatines en el cerro Catedral no solo está prohibido, sino que es una mala idea. Las condiciones naturales no son un parque de diversiones, y la seguridad en la montaña empieza con decisiones responsables.

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