Imputaron a un chofer de Uber por intento de homicidio tras una discusión con un pasajero
Fue tras una discusión por la cantidad de pasajeros. El acusado dijo haber actuado en defensa propia. La víctima sufrió heridas graves y fue operada de urgencia.
Un trabajador de una aplicación de transporte de pasajeros (Uber) fue imputado por tentativa de homicidio luego de protagonizar un violento episodio en la madrugada del sábado 26 de abril. La fiscalía sostuvo que el acusado, identificado como Facundo Galván, oriundo de Buenos Aires, atacó con un arma blanca a uno de los pasajeros tras una discusión originada durante el viaje, por la cantidad de personas que viajaban en el vehículo.
El hecho ocurrió en la intersección de la avenida Los Pioneros y la calle Nilpi. Allí, según la hipótesis del Ministerio Público Fiscal, el conductor descendió del automóvil y, tras un altercado, hirió de gravedad al pasajero. La víctima sufrió cuatro lesiones punzocortantes en el hemitórax izquierdo, lo que obligó a su intervención quirúrgica de urgencia, incluyendo la colocación de un tubo de tórax. De acuerdo con los médicos, las heridas pusieron en riesgo su vida y lo dejaron incapacitado para trabajar por más de un mes.
Galván se dio a la fuga, pero fue detenido horas después. En la audiencia de formulación de cargos, la fiscalía presentó una batería de pruebas que incluye testimonios, registros del viaje a través de la aplicación, actas policiales, informes médicos, croquis del lugar del hecho y el secuestro del vehículo involucrado.
Durante la audiencia, el imputado —quien recibió asistencia del defensor público penal Marcos Miguel— negó los hechos tal como fueron planteados por la fiscalía. Alegó haber actuado en legítima defensa y sostuvo que fue agredido primero por el pasajero, quien, según dijo, se encontraba alcoholizado y viajaba con más personas de las permitidas. “Tenía miedo, me estaba amenazando”, declaró ante el juez César Lanfranchi, y agregó que nunca había vivido una situación similar y que no posee antecedentes penales.
A pesar del planteo de la defensa, el juez de garantías tuvo por formulados los cargos en su contra como autor del delito de tentativa de homicidio. Ordenó además una medida de prisión domiciliaria con tobillera electrónica por 15 días, en virtud de los riesgos procesales.
La investigación continuará durante los próximos cuatro meses, plazo legal previsto hasta el 27 de agosto, tiempo en el que se deberá reunir la prueba restante para avanzar hacia una eventual acusación formal.
