
Carlos Di Franco denuncia: "Está mucho más fácil ser ilegal que ser legal hoy"
El presidente de la Asociación de Propietarios de Taxis de Bariloche, criticó la falta de consenso en el debate sobre Uber y denunció el abandono del transporte legal en la ciudad.
En medio de un debate agitado en el Concejo Deliberante de Bariloche sobre la regulación de las plataformas de transporte digital como Uber, Carlos Di Franco, presidente de la Asociación de Propietarios de Taxis, expresó su descontento con la falta de avances legislativos y la postura adoptada por los concejales, a quienes acusó de no tener un enfoque claro para abordar los desafíos del transporte en la ciudad.
El proyecto para habilitar las plataformas digitales de transporte fue presentado en septiembre del año pasado, pero hasta ahora no logró avanzar en la comisión correspondiente, lo que generó creciente frustración en el sector del transporte legal. En una reciente reunión de la Comisión de Economía, a la que fueron convocados conductores de Uber, remiseros y taxistas, Di Franco cuestionó la metodología del debate, describiéndolo como improductivo y sin objetivos concretos.
"Esto no es un debate, es un enfrentamiento sin sentido entre los trabajadores", expresó Di Franco ante los concejales. Según el dirigente, la Comisión de Economía está utilizando este tema como una forma de desviar la atención de otros problemas pendientes en la ciudad, mientras se enfrenta a un "conflicto innecesario" entre los trabajadores del transporte.
Una de las principales críticas de Di Franco se centró en la falta de regulación de las plataformas digitales. El presidente de la Asociación de Taxis se mostró enérgico al afirmar que no se puede dejar el transporte urbano en manos de "extranjeros" que operan sin aportar nada al bienestar económico local. Según él, plataformas como Uber se benefician de los servicios de transporte sin cumplir con las obligaciones fiscales o laborales, lo que genera una competencia desleal.
Además, Di Franco se refirió a la postura de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que en una primera votación declaró a estas plataformas como "empresas de transporte", lo que implicaría la necesidad de un convenio laboral con representación sindical. "Lo que decida la OIT tiene mucho más peso que cualquier Concejal local", remarcó el dirigente.
El presidente de los propietarios de taxis también comparó la situación actual con la falta de regulación de plataformas digitales con la hipotética legalización de estupefacientes: "Es como si dijéramos que vamos a vender droga mientras discutimos su legalización. No podemos permitir que operen sin reglas claras".
La burocracia y los costos
Di Franco también destacó una serie de problemas que afectan a los trabajadores del transporte legal, que en muchos casos se ven obligados a lidiar con la burocracia, los costos elevados y las demoras para poder ejercer su actividad.
Uno de los principales problemas que enfrentan los transportistas legales es la demora de hasta 40 días para obtener un turno de Verificación Técnica Vehicular (VTV). Además, la obtención del carnet de conducir profesional se ha vuelto cada vez más dificultosa, con cursos que ahora requieren de tres días de capacitación y demoras que se extienden hasta varios meses. Los costos asociados también han aumentado de manera significativa, pasando de 70.000 a 140.000 pesos para obtener el carnet, lo que afecta directamente a los trabajadores que dependen del día a día.
"Lo que antes se podía hacer en 48 horas, ahora lleva meses", lamentó Di Franco, quien señaló que esta burocracia está dejando a muchos trabajadores al margen, imposibilitados de ejercer su actividad mientras esperan los trámites necesarios.
A la par de estos problemas administrativos, los costos de las habilitaciones comerciales para los taxistas también han aumentado considerablemente, pasando de 42.000 a 96.000 pesos. Sin embargo, en contraste, sectores como el turismo no parecen verse tan afectados: "Las tarifas de esquí y hotelería de lujo están congeladas, mientras que a los taxistas nos aumentan todo", subrayó.
Propuestas alternativas
Para Di Franco, la solución a los problemas del transporte no pasa solo por regular las plataformas digitales, sino por un replanteo integral del sistema de transporte en Bariloche. En este sentido, propuso que antes de avanzar con una normativa para Uber, se debe sentar a todas las partes del sector para discutir el transporte en general, abordando tanto las aplicaciones como los problemas que enfrentan los transportistas legales.
"La solución no es solo regular Uber, sino pensar en un sistema de transporte que funcione para todos", concluyó.
Mientras tanto, Di Franco y otros referentes del sector continúan presionando para que la provincia y el municipio actúen con rapidez. De lo contrario, advierten que la situación podría empeorar, afectando tanto a los trabajadores como a la calidad del servicio que se ofrece a los ciudadanos.