
Con tarifas congeladas, Bariloche busca sostener su liderazgo como destino invernal
En el lanzamiento oficial de la temporada de invierno 2025, Bariloche anunció que mantendrá las tarifas de hotelería y pases de esquí al mismo valor que el año pasado. La estrategia apunta a sostener el turismo nacional en un contexto de fuerte caída del consumo.
En diálogo con Radio Con Vos Patagonia, el presidente de la Asociación Hotelera Gastronómica de Bariloche, Martín Lago, analizó el panorama del invierno 2025 tras la presentación oficial de la temporada que se realizó en el Hotel Faena de Buenos Aires, con la participación de autoridades nacionales, provinciales, municipales y empresarios del sector. “Yo creo que el éxito o el fracaso de la temporada estaba fijado casi en una única variable, y era el precio”, afirmó durante la entrevista, y remarcó que en un contexto económico tan delicado, “hoy manda el bolsillo, nunca dejó de mandar, pero ahora más que nunca”.
Lago explicó que, ante esta realidad, Bariloche decidió anticiparse y centrar su estrategia promocional en mantener tarifas, una decisión que no sólo busca sostener la demanda, sino también mostrar un diferencial frente a otros destinos. “El consumidor hoy tiene herramientas más claras para saber qué valen las cosas y qué está dispuesto a pagar. Por eso había que reaccionar rápido, contener los aumentos y comunicarlo con claridad”, señaló.
En ese marco, se lanzó el programa Bariloche 6, que incluye descuentos, promociones, hoteles que congelaron precios respecto a 2024 y el pase de esquí que se mantiene en $115.000, mismo valor que la temporada pasada. “No estamos redescubriendo la pólvora, simplemente estamos visualizando una estrategia muy concreta: atacar el precio para cuidar el mercado que Bariloche viene generando hace décadas”, dijo.
Consultado por los niveles de ocupación, Lago explicó que si bien la ocupación hotelera general aún no alcanza cifras récord, se observa mayor movimiento en la hotelería céntrica, sobre todo impulsada por el mercado brasileño. “En invierno juega mucho la ubicación. Los operadores brasileros centralizan su operación en hoteles grandes y bien ubicados para resolver la logística”, sostuvo.
Otro punto clave de la charla fue el impacto del turismo informal. “Vemos un porcentaje enorme de turistas que no se están hospedando en establecimientos formales. Eso vuelve a encender las alarmas sobre la informalidad, que ya estimamos en más de 20.000 camas fuera del circuito legal”, remarcó.
Además, el presidente de la Asociación Hotelera señaló que los turistas acortan sus estadías, priorizan fines de semana largos y ajustan mucho el gasto. Esto se refleja especialmente en la gastronomía, con una fuerte caída en el consumo promedio. “Lo venimos notando desde el verano: el número de cubiertos bajó, y quienes vienen hacen un uso muy racional del dinero”, explicó.
A pesar del panorama complejo, los datos del mercado muestran señales positivas. Según la plataforma Despegar, una de cada cuatro reservas nacionales es para Bariloche, lo que lo posiciona como el destino más elegido del país. Además, se espera un incremento del 20% en la cantidad de vuelos respecto al invierno anterior, un dato clave para una ciudad que depende fuertemente de la conectividad aérea.
“Bariloche tiene una demanda sostenida, construida con décadas de promoción y trabajo. Hoy el desafío es no perder lo que se logró, y la manera de hacerlo es siendo competitivos”, afirmó Lago. También destacó la importancia de la conectividad aérea en este contexto: “Las rutas no están bien, sumado al clima, eso hace que el avión sea una solución. Y hoy las tarifas son bastante razonables, incluso con diferencias lógicas entre Buenos Aires y San Pablo”.
Al cierre de la entrevista, el referente hotelero expresó su deseo de que la temporada sea buena para todos los sectores que integran la economía local. “Nuestros vecinos, emprendedores y empresarios lo necesitan. Ojalá el esfuerzo que estamos haciendo desde el sector privado tenga resultados”, concluyó.