Una concejal fue tratada de “loca” y le recordó al oficialismo que ya no está en el gremio
Los audios de una conversación en el seno del oficialismo, siguen dando que hablar. Las fuertes consideraciones de Gerardo Del Río contra los representantes de Incluyendo Bariloche.
Una serie de escuchas, que fueron dadas a conocer en los últimos días, sumergen en una nueva polémica al oficialismo. Los audios, que fueron difundidos a través de videos en las redes sociales, tienen como protagonista al presidente del Concejo Municipal, Gerardo Del Río (PUL), en el marco de una conversación que mantuvo con otros concejales y colaboradores más cercanos.
En la charla que luego tomó estado público, Del Río le explicó a Jazmín Venini, la dirigente libertaria que estuvo a punto de reemplazar al concejal Tomás Hercigojna, cómo era el día a día en el legislativo. Allí contó que el PUL llegó al poder inesperadamente y que, tras una magra elección, en la que el oficialismo alcanzó 12.993 votos, apenas lograron tres concejales. “La gente dijo ‘les vamos a mear la vida”, les damos la Presidencia y les vamos a poner un Concejo totalmente disgregado”, mencionó acerca de una composición con seis bloques políticos diferentes. Sin embargo, se detuvo en los integrantes de Incluyendo Bariloche: “Y después, Leandro (Costa Brutten) y Julieta (Wallace), uno más loco que el otro”.
Este miércoles, durante una entrevista en Radio Con Vos Patagonia, Wallace fue consultada acerca del calificativo que le había asignado el presidente del Concejo Municipal. La edil, quien se mostró sorprendida, aseguró que no había escuchado el audio, pero entendió que se trataba de “una falta de respeto total, no solo en términos institucionales, la representación, sino también en términos personales”.
Para la concejal, estas declaraciones muestran que el oficialismo transita por un lugar “equivocado” y alertó que “si creen que así, con tres concejales, van a poder gestionar los temas importantes de la ciudad. Creo que tienen una muy poca experiencia en manejo institucional, el Estado no es un gremio, es algo un poco más complejo”.
Wallace buscó salir del agravio en su contra, que -según trascendió- causó profundo malestar en otros concejales, y opinó que más allá de “todos los condimentos y toda la falta de respeto”, aquellas gestiones irregulares o ilegales se debatirán no solo en el Deliberante sino también en la Justicia ordinaria. Luego invitó a Cortés a lograr consensos para lograr la aprobación de sus proyectos que, aclaró, inevitablemente sufrirán modificaciones en esa búsqueda.
Por último, se refirió a la situación del oficialismo y su escaso peso en el Concejo Municipal. “Es la que le toca”, resumió la referente de Incluyendo Bariloche al comparar el contexto actual con el de otros Intendentes que contaron con el acompañamiento de cinco o siete concejales propios. Luego volvió sobre los acuerdos ya que, de otra manera, “no veo que puedan gestionar los principales problemas que hoy tiene la ciudadanía y con eso intentar resolverlo”.
Paredes que escuchan
Las escuchas fueron presentadas ante organismos públicos, a partir de una serie de reclamos que inició la referente libertaria, y actual funcionaria municipal, que exige la banca que se le había asignado tras la renuncia del concejal Tomás Hercigojna, quien luego volvió sobre sus pasos y pidió su reincorporación al Deliberante.
En todo momento Del Río es el encargado de aportar varias definiciones acerca del trabajo en los pasillos y el modo en que se analiza cada proyecto. El punto más controvertido se dio cuando le pidió a Venini que firmara su renuncia al cargo, como medida preventiva, antes de asumir como concejal.