Sobreseyeron al primer acusado en el caso Bargiela por falta de pruebas
La Justicia sobreseyó a Gustavo Bracamonte en el caso Bargiela. Tras meses de investigación, no se hallaron pruebas que lo vinculen al crimen del excampeón de jiu-jitsu.
La Justicia dictó el sobreseimiento de Gustavo Carlos Bracamonte en la causa por el homicidio de Facundo Nicolás Bargiela, el excampeón nacional de jiu-jitsu asesinado en abril de 2024. La resolución, firmada por el juez de Garantías Juan Pablo Laurence, señala que no se encontraron pruebas suficientes para sostener la acusación contra Bracamonte, lo que llevó a su exoneración definitiva en el caso.
El crimen de Bargiela conmocionó a Bariloche y despertó una fuerte reacción ante la brutalidad del asesinato. Su cuerpo fue hallado el 9 de abril de 2024 en inmediaciones de Esandi y la Ruta de Circunvalación, con un disparo en la cabeza. La investigación inicial apuntó a que había sido víctima de un plan premeditado en el que participaron al menos cuatro personas. Tres de ellas, Jonathan Ariel Rabinovici, Santiago Gabriel Figueroa y Julio Argentino Torres, fueron condenadas en mayo y junio de 2024, mientras que Bracamonte continuó bajo la lupa judicial por su presunta participación.
La acusación sostenía que Bracamonte habría colaborado en el engaño a la víctima, aprovechando su vínculo de confianza con ella. Según la hipótesis inicial, su papel habría sido clave para lograr que Bargiela subiera voluntariamente al vehículo en el que posteriormente fue trasladado al lugar donde lo ejecutaron. Sin embargo, tras meses de análisis de pruebas, entre ellas pericias de ADN, registros telefónicos y declaraciones de testigos, la fiscalía concluyó que no existía evidencia suficiente que lo vinculara directamente con el homicidio. Ante esta situación, el Ministerio Público Fiscal solicitó el sobreseimiento del imputado, postura que fue acompañada por la defensa de Bracamonte.
En su fallo, el juez Laurence avaló la postura de la fiscalía y descartó la participación de Bracamonte en el crimen, señalando que no se logró reunir elementos probatorios que permitieran sostener su implicancia en una instancia posterior del proceso. Además, ordenó que se deje constancia de que la investigación no afectó el buen nombre y honor del acusado, lo que implica que su expediente judicial quedará libre de antecedentes relacionados con este caso.