Gennuso y la causa Techo Digno: “Si no hubiéramos gestionado el dinero, hoy no habría viviendas en Bariloche”
El exintendente de Bariloche defendió su gestión y subrayó el compromiso de su administración en la finalización de las viviendas. A la espera del avance de su proceso judicial, habló en Radio Con Vos
Tras finalizar su mandato, el exintendente Gustavo Gennuso enfrenta un proceso judicial por el manejo de fondos del plan Techo Digno, un programa federal de vivienda social que impulsó la construcción de miles de hogares en el país y en el que participaron numerosos municipios rionegrinos. En una entrevista con Radio Con Vos Patagonia, Gennuso defendió las decisiones tomadas en su administración, asegurando que fueron necesarias para completar las viviendas que muchas familias de Bariloche hoy ocupan. “Nos resulta raro que solo en Río Negro se haya judicializado este tema, cuando en otras provincias enfrentaron las mismas dificultades”, expresó.
El programa Techo Digno se originó en 2013 como un plan del gobierno nacional por abordar el déficit habitacional en el país. A través de convenios con los municipios, los fondos federales eran destinados a la construcción de viviendas sociales en terrenos provistos por las localidades. No obstante, la transición política de 2015, y el cambio en la administración nacional, impactaron el desarrollo de este y otros planes de vivienda, lo que dejó a muchas ciudades con obras inconclusas y recursos financieros insuficientes.
Al asumir su gestión en 2015, Gennuso se encontró con un panorama complejo: obras habitacionales apenas comenzadas, con porcentajes de avance de entre el 20% y el 35% y sin certeza sobre la continuidad del financiamiento por parte del nuevo gobierno nacional. “Nos encontramos con una gran decepción al ver que no había recursos suficientes y que la administración nacional estaba desinteresada en continuar con los planes iniciados”, recordó el exintendente.
Ante esta situación, el equipo de Gennuso decidió retener los fondos destinados a Techo Digno en una cuenta del Banco Credicoop, generando intereses para fortalecer las finanzas municipales y así, eventualmente, poder continuar con las obras. Según explicó, este enfoque respondió a la intención de proteger el capital destinado a las viviendas, asegurándose de que los recursos estuvieran disponibles cuando el proyecto se reanudara. “Se hizo una estrategia para cuidar el dinero; lo colocamos en el banco con la idea de que generara intereses, de modo que el municipio pudiera afrontar sus necesidades”, precisó Gennuso.
El dinero, aclaró el exintendente, nunca fue desviado para cubrir otros gastos municipales, como sueldos o deudas, sino que permaneció bajo la órbita del plan de vivienda. Esta operación, explicó, fue similar a la que llevaron a cabo otros municipios de Río Negro y de otras provincias que enfrentaron problemas de financiamiento en sus programas de vivienda. “Nos encontramos en la misma posición que otros intendentes que también retuvieron los fondos en sus cuentas, porque entendimos que ese dinero era crucial para completar las viviendas”, comentó.
La judicialización en Río Negro y el contexto político
En contraste con lo que ocurrió en otras provincias, en Río Negro los proyectos de vivienda inconclusos de Techo Digno resultaron en procesos judiciales contra varios intendentes, entre ellos Gennuso, quien enfrenta cargos por peculado. “Nos llama la atención que en otras partes del país no se haya judicializado, pero aquí en Río Negro sí”, cuestionó. El exmandatario subrayó que los recursos fueron administrados con transparencia y que, en su opinión, los procesos judiciales responden a una “persecución política” motivada por factores ajenos a su gestión.
“La acusación de peculado está traída de los pelos, porque jamás tocamos un peso de esos fondos para otro fin. Solo queríamos proteger los recursos de Bariloche, y ahora se nos acusa de lo contrario”, aseguró, visiblemente molesto.
Según Gennuso, los fondos que el municipio administró cautelosamente durante su mandato fueron clave para retomar las obras cuando finalmente se destrabó el plan. Gracias a negociaciones del gobierno provincial, el Instituto de Planificación y Promoción de la Vivienda (IPPV) logró acceder a un crédito nacional que permitió la finalización de los proyectos habitacionales en Bariloche y en otros municipios de Río Negro.
“Nosotros hicimos lo que había que hacer para que las viviendas se terminen. Sin esa retención de fondos, sin ese cuidado, las familias hoy no tendrían sus hogares. Este era el objetivo y lo cumplimos”, afirmó, enfatizando la responsabilidad social detrás de su gestión. “Hoy 900 familias de Bariloche están en sus casas gracias a que cuidamos el dinero y negociamos su uso, incluso cuando el Estado Nacional no nos daba ninguna seguridad”.
Gennuso destacó que la reactivación del programa fue fruto del esfuerzo conjunto entre los gobiernos municipales y provinciales, que trabajaron en equipo para superar las trabas administrativas y financieras que frenaban las obras. “Nosotros tuvimos que salir a buscar los fondos, porque el Estado Nacional se desentendió de la vivienda social en los últimos años. Fue necesario un esfuerzo monumental para completar estas obras”, agregó.
En su balance, Gennuso se mostró crítico del manejo de los planes de vivienda social por parte de las administraciones nacionales de los últimos años. Según su opinión, tanto durante el gobierno de Mauricio Macri como en el de Alberto Fernández, la vivienda social no recibió el apoyo suficiente, lo que dejó a miles de familias a la espera de soluciones habitacionales. “Los planes de Techo Digno que entregamos ahora fueron firmados en 2013, durante el gobierno de Martini. Ninguna gestión posterior priorizó los fondos para estos proyectos”, explicó el exintendente.
En este sentido, Gennuso consideró que la falta de políticas públicas sostenidas y de coordinación entre los distintos niveles del Estado han perjudicado el acceso a la vivienda digna, que debería ser una prioridad nacional. “Sin políticas claras, los municipios quedamos a la deriva, tratando de resolver problemas estructurales sin el apoyo que necesitamos”, concluyó.
Cómo sigue la causa judicial
Tras un primer intento días atrás, el juez Marcelo Álvarez Melinger decidió pasar a cuarto intermedio hasta el próximo jueves 7 de noviembre.
En esa fecha, se definirá si se acepta el pedido de sobreseimiento presentado por la defensa de Gennuso o si se habilita el control de acusación que permitiría a la fiscalía avanzar hacia un juicio.
La defensa de Gennuso mantuvo su postura de que la maniobra cuestionada no fue ejecutada directamente por el exintendente. Además, argumentaron que los fondos en cuestión nunca abandonaron el ámbito municipal y que el total de las viviendas fue entregado.
Por su parte, el fiscal jefe Martín Lozada sostuvo que Gennuso trasladó 105 millones de pesos de una cuenta específica del Banco Nación a otra en el Banco Credicoop, y que constituyó varios plazos fijos con esos fondos, generando un supuesto perjuicio en la administración pública que calificó como “peculado”.
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