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Fernando Quintana: "Necesitamos más médicos residentes para formar profesionales de excelencia en Intecnus"

El presidente de Intecnus, Fernando Quintana, destacó los logros tecnológicos del centro, la necesidad de formar residentes médicos y las dificultades económicas que enfrenta.

Fernando Quintana: "Necesitamos más médicos residentes para formar profesionales de excelencia en Intecnus"

El presidente de Intecnus, Fernando Quintana, destacó los logros tecnológicos del centro, la necesidad de formar residentes médicos y las dificultades económicas que enfrenta.

El 21 de diciembre de 2017, Intecnus recibió a su primer paciente, marcando un hito en la medicina de alta complejidad en la región. Con poco más de siete años de trayectoria, la institución ha evolucionado hasta convertirse en un centro de referencia en el ámbito de la medicina nuclear y radioterapia, especializado en imágenes metabólicas. Este tipo de estudios permiten a los profesionales observar no solo la anatomía de los órganos, sino también su funcionalidad, una herramienta crucial en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades graves como el cáncer.

Fernando Quintana, presidente de la Fundación Intecnus y doctor en ciencias de la ingeniería, explicó la importancia de estas imágenes avanzadas: “Una imagen anatómica nos muestra la forma del órgano, mientras que la imagen metabólica nos dice cómo está funcionando. Esto nos permite detectar con mayor precisión zonas afectadas por enfermedades como el cáncer, neurodegenerativas o neuroendocrinas. Es una herramienta fundamental para planificar tratamientos menos invasivos y más efectivos. El uso de esta tecnología es clave para minimizar los daños a los tejidos sanos durante las cirugías o tratamientos oncológicos, lo que mejora significativamente la calidad de vida de los pacientes.

A pesar de los avances tecnológicos y el reconocimiento a nivel nacional, uno de los principales desafíos que enfrenta Intecnus es la formación de profesionales médicos. Si bien la institución cuenta con tres residencias médicas aprobadas, solo dos están activas, financiadas íntegramente por la fundación. “Hemos logrado poner en marcha las residencias con mucho esfuerzo, pero no hemos conseguido que el Ministerio de Salud de la Nación ni el de la provincia nos envíen médicos residentes”, lamentó Quintana.

Este problema es especialmente grave en un contexto donde la formación de especialistas es fundamental para el futuro del sistema de salud. "Nuestra postura es simple: tenemos el edificio, los equipos, los profesionales y los pacientes. Solo necesitamos que nos envíen médicos residentes para formarlos. Nosotros no cobramos nada por esta formación", agregó.

El presidente subrayó que la crisis en la formación médica no es un problema aislado de Intecnus, sino un reflejo de una situación más amplia a nivel nacional: “La falta de profesionales no es un problema de la Comisión Nacional de Energía Atómica, es un problema del país. Lamentablemente, no hemos logrado que los ministerios de Salud lo entiendan. La fundación no puede pagar a todos los profesionales que la Argentina necesita”.

Un centro integral 

Intecnus, que es administrado por una fundación sin fines de lucro, fue diseñado para ofrecer un servicio integral en el tratamiento de enfermedades oncológicas, desde el diagnóstico hasta el tratamiento y la rehabilitación. “En nuestro centro, un paciente puede realizarse el diagnóstico por imágenes más preciso, someterse a quimioterapia, cirugía y radioterapia, todo en un mismo lugar. No necesitan viajar a otras ciudades como Roca o Buenos Aires”, detalló Quintana.

Uno de los servicios más avanzados que ofrece Intecnus es la braquiterapia, un tratamiento para el cáncer de próstata, pulmón y cuello de útero, que consiste en la colocación de pequeñas semillas radioactivas directamente en la zona afectada. “El tratamiento dura solo 20 minutos y el paciente puede irse caminando después con una anestesia leve. Para poder realizar este tipo de intervenciones, construimos uno de los quirófanos más completos de la región”, añadió Quintana. El equipamiento avanzado y la complejidad de los tratamientos oncológicos que ofrece Intecnus son fundamentales para la población de Bariloche y toda la Patagonia.

Pero el compromiso de Intecnus no se limita a la atención médica local. La institución ha firmado un convenio con el Servicio de Salud del Reloncaví, en la zona de Puerto Montt, Chile, que incluye la atención de pacientes, el asesoramiento para la construcción de un centro de medicina nuclear y la formación de profesionales chilenos. “Chile tiene un desarrollo en el área nuclear muy inferior al de Argentina. Nosotros estamos en una posición de poder transferir ese conocimiento sin inconvenientes”, comentó Quintana.

Sin embargo, la situación económica de Intecnus es crítica. A pesar de su rol estratégico en la región, la fundación enfrenta una deuda que supera los 200 millones de pesos con el Ministerio de Salud de Río Negro y el Instituto Provincial del Seguro de Salud (Ipross). “Este edificio fue financiado por el Estado Nacional, lo cual agradecemos enormemente, pero la fundación debe mantenerse con lo que pagan las obras sociales, y eso no es suficiente”, explicó Quintana. Las obras sociales, que pagan en pesos, están desfasadas respecto a los costos de insumos y tecnología, que son mayoritariamente en dólares.

El centro también se enfrenta a problemas en la renovación de equipos. “Algunos equipos, como el de braquiterapia, están fuera de servicio porque los proveedores tardan hasta un año en reponer los repuestos. En los últimos dos años hemos invertido entre 500 y 600 mil dólares por año en repuestos y servicios”, detalló Quintana. Este retraso en los pagos, sumado a la inflación y la crisis económica del sector de salud, pone en jaque el funcionamiento de Intecnus.

Un futuro con tecnología de punta

Intecnus no ha dejado de atender a los pacientes derivados del Hospital Zonal de Bariloche, a pesar de que el convenio con el Ministerio de Salud de la provincia venció en junio del año pasado. “Seguimos atendiendo a los pacientes que no tienen cobertura, aunque esto signifique un costo hundido enorme para la fundación”, afirmó Quintana. La misión de Intecnus, desde sus comienzos, ha sido ofrecer atención sin fines de lucro, enfocándose en la formación de recursos humanos y la investigación, lo que hace que cualquier excedente económico sea reinvertido en la institución.

El objetivo a largo plazo de Intecnus es claro: “Queremos seguir acercando la mejor tecnología a toda la Patagonia, formar recursos humanos e invertir en investigación y desarrollo de nuevos radioisótopos”, comentó Quintana. Sin embargo, para lograr estos objetivos, es fundamental que se solucionen los problemas de financiamiento y se atienda la necesidad de residentes. "Este centro no fue diseñado para generar ganancias, fue puesto aquí para federalizar el acceso a la mejor tecnología disponible en Argentina", concluyó Quintana.

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